Ayer conocí a Kristy y Gogo, dos chicas griegas amigas de Vasso. Un encanto ambas, unas autenticas anfitrionas de su pais. Me fuerón a buscar en coche a mi casa, me llevaron a cenar, me invitaron, me llevaron de regreso a casa. Fue una grata velada en la que se tratarón temas de diversa índole: desde la pronunciación de la 'j' hasta el panórama político en nuestros respectivos paises, pasando por nuestras historias personales. Dada la contención a la que me había visto sometido durante la última semana, hablé como una cotorra. Ellás tampoco se quedarón atrás, muy graciosas.
Además, empiezo a hacer migas con mis compañer@s de laboratorio. Todavía no les he hecho ni un moonwalker ni una mirada psicópata, pero ya han llegado las primeras bromas. Como que la cosa parece ir mejorando.
Ela reeeee!, que viene a ser ¡fenomenal!
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